Como al rey, me llena de orgullo y satisfacción ver las huestes del PP, ante tamaño desfile militar. me recuerda aquellos años donde se festejaba el final de la guerra civil victoriosa, lo único que variaba en lo físico, es que los ediles del PP no presumen de aquél abdomen prominente de los generales del pasado siglo.
Leganés, ha estado silente, en ese sopor veraniego que nos recuerda "El amor en los años del Cólera" de Gabo
Hemos recreado hazañas bélicas, esta debe de ser la nueva Cultura de Doña Beatriz Alonso (PP) y de su escudero, elegido a dedo, de cuyo nombre como Cervantes no debo acordarme.
Digamos que Leganés ha sido una pasarela "pepinera" de moda militar de diferentes épocas.
Es decir que, la Cultura de este pueblo llamado"Pepino" es bélica, por aquello quizás de que su hacedor en el partido, fue a las Azores a meternos en una guerra real.
Leganés ha estado escaso de asistentes en este otro carnaval, eso me decía un miembro de la Izquierda vencida , antes llamada Unida.
Yo le decía que ahora la guerra es distinta, no es bélica, es de rodilla en tierra zapateril y rajoyniana ante Alemania.
Las guerras ,Alcalde mío,no son como empiezan son como acaban cuando los uniformados cuelgan sus guerreras, y el "Pepino " recupera su calma, y la Policía Local en cumplimiento de su deber,de normas y códigos nos denuncia, como debe de ser, por aquello de "Las horas extraordinarias".
Por fin hemos recuperado la calma, como la tienen los personajes franquistas con sus placas en nuestras calles, y es que, Zapatero hizo una chapuza con la Ley de Memoria Histórica, ¿para qué cumplirla?.
En fin, debe de ser que en Leganés alguien tiene una nostalgia guerrera en su pensamiento simple, los uniformes militares y las guerras, aunque sean cinematográficas, son admiradas por aquellos que nunca las han conocido.
JOSMAN.
