Banderas y remiendos.
En Madrid han colocado una bandera por cada fallecido por el COVID-19, pero es solo un homenaje, que como todo, se lo llevará el viento.
Vivimos un tiempo en que ni la bandera ni los políticos curan enfermos, nunca lo hicieron, salvo que algún diputado lo fuera, hace más falta médicos y enfermeros que banderas, que se abran debidamente los ambulatorios de primaria, que se refuercen las plantillas, así como el apoyo económico a la ciencia, que ella es la única que puede dar con la vacuna y un medicamento efectivo.
La bandera es el símbolo de la patria, merece respeto, sólo eso, pero la bandera no sana, ponérsela a un enfermo cada ocho horas y seguirá igual, Madrid ha fracasado por su política de recortes, y de nada vale pensar otra cosa. Ayuso heredó una mala práctica que ya venía de hace 15 años, y solo se puede hacer lo que hacía mi madre allá en los años cincuenta, ponerle un remiendo al pantalón. Solo eso podemos esperar, un remiendo.
Josman.
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