jueves, 1 de mayo de 2014

YO -TAMBIEN- SOY SOLO UN HOMBRE.



Cuando un general volvía de una victoria a Roma, en el desfile a su lado, había un esclavo que todo el rato le iba repitiendo, "no olvides que sólo eres un hombre", para que este tocara de pies en el suelo y se alejara del vanitas vanitatis.

Por ello yo muchas noches, hago un ejercicio de humildad, y:

Me asomo, profundamente
al cauce de mis dolores
y me responde el Butarque:
¡soy tu espejo, pobre hombre!
Y entierro mi escaso ego,
mi soberbia en los honores,
y analizo mi oro...
 descubro que es solo cobre,
 como un céntimo de Euro
en mi bolsillo de pobre.


JOSMAN.

1 comentario:

Liberto Malasaña dijo...

Hola, amigo. Así es: sólo es rico quien descubre en su pobreza la grandeza del universo, o de Dios, si lo prefieres. Los hombres somos inmensamente afortunados, pero el becerro de oro nos deja ciegos y sordos, por lo que no oímos ni vemos el manantial de vida que nos rodea y es nuestro, prestando toda atención al vacuo mal hacer de la nada del hombre sin pueblo y sin poemas. Que gran cosa es un árbol, ¿verdad? Un abrazo.