PORQUE CUMPLÍA UN AÑITO. (Rafael 09/03/1917- Darío 03/08/2017)
Ayer recordé a mi padre,
felicitando a Darío,
cómo se pasa la vida
cómo se ha pasado un siglo.
Cómo del hórreo asturiano
pasamos al aluminio
que blanquea las ventanas
de éste hogar de mi hijo.
Cómo en las nuevas cosas
seguimos siendo lo mismo,
ahora es mi barba cana,
y él, tiene recién nacidos
blanqueando cinco perlas,
incipientes dientecitos.
Y ese andar en titubeo
agarrándose a los sitios,
evitando las caídas
aunque sea un torbellino.
Me senté como un patriarca,
como un abuelo servido
a quien llevan la porción
de la tarta en su platillo,
y recordé a mi padre
en el sillón, tan tranquilo,
mientras los demás jalean
como un rumor de grillos.
Y entre todos, sobre todos,
se me acercó mi niño,
y la luz de la pasión
que tantas veces repito,
se levantó en mis piernas
y me sonrió Darío.
Lo demás, cien canapés,
cerveza, naranja, vino,
diez regalos infantiles
cantos, risas, y cariños,
y una velita encendida,
porque cumplía un añito.
JOSMAN.
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