Quizás en esta foto, con más abdomen, hace 4 años, estaba pensando en elaborar los destellos de "Amor Butarqueño" *
En mi opinión, no existe la inspiración,
existe el pensamiento y la reflexión, y después la elaboración, los aprendices de
poetas, nos observamos y podemos comprobar que es el magín el que da vueltas a una
idea, mejor o peor, el cerebro nos la da amasada y digerida, es cuando si la idea
es breve surge el destello, que es a lo que llamo un pensamiento breve de poco más
de media docena de versos, este surge como el destello que nos envían las estrellas
lejanas y los vemos parpadear, a veces he escrito durmiendo o soñando y ha quedado
la estrofa en mi memoria, como si la mente tuviera eso mismo, una cuartilla, tinta
y una mano que lo dejara plasmado, es igual que cuando planeamos un viaje y en la
mente pensamos en el trazado de camino o carretera, el lugar de salida y el de destino,
y así es la creatividad por simple o mediocre que sea el resultado de la misma.
Siempre
escribo lo que sueño,
y hasta
escribo soñando,
cual
si tuviera el cerebro
papel,
tinta y una mano,
como
si hubiera otro yo,
cerebral
, complementario,
y al
teclado donde escribo
con mi
otro yo lo traslado,
sólo
soy una matrona
que tira
para alumbrarlo,
después
se contempla todo,
comas,
puntos y vocablos,
la asonancia
de la rima,
la métrica
es un canto
que te
suena en el oído,
y así,
el destello es creado.
Siempre
la mano escribe
lo que
el cerebro ha dictado,
eso de
la inspiración
no es
un fruto que te es dado
bajo
una sombra tranquila
bajo
un almendro blanco,
en realidad
es la almohada
bajo
un sueño elaborado,
carezca
de arte o no,
se escribe
lo que soñamos.
JOSMAN.
* Ese lugar de la foto es donde en ocasiones voy a escribir, o como dirán los que no escriben, a pensar en tonterías, en esa sombra escribí hasta teatro: Mi Loco del Butarque, y la obra transcurre en ese mismo lugar, el médico, el loco y un pescador que hablan de amor, de vida y de muerte.
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