Tranquil@s no voy a escribir de política, sólo de una visión cultural de todos los tiempos de éste llamado "Pepino"
Desde hace 35 años, el 90% de cuanto he dejado escrito sobre los folios, con mayor o menor calidad literaria, es y era para hacerlo sobre Leganés, hoy gracias a las redes sociales, soy más leído según las estadísticas de diferente blogs en la América de habla castellana que en éste Légamo que siempre ha obviado cuanto se ha dicho de él con cierta crítica.
Es normal, en la laguna de Mariapascuala de Leganés, como en la Albufera de Valencia sólo germina el arroz y la Fideguá.
Leganés debe mucho a sus poetas, pero como Felipe IV y sucesores, Leganés nunca ha dado nada a los hombres y mujeres de esta rama de la cultura. Y no hablo de políticos actuales y pasados, más interesado en otras parcelas de la ciudad enladrillada.
Yo no le debo nada a Leganés, como Machado: "Con mi trabajo pago el pan que como y el piso donde habito" Y EL BOLÍGRAFO QUE USO Y MI ORDENADOR.
A Leganés le dejo "Mi Quijote en Polvoranca" " Mis Hermanos Rejón", "Mis Brujas" , -llamadas del Butarque- "Mi amor Butarqueño", "Mi Lúa", " Mi Otoño y Ocaso", "Mi, en el Hondón del alma", y miles de cosas más que nacieron y se gestaron en Leganés, para no ser de Leganés.
Mientras, con mayor o menor calidad, porque no soy crítico ni juez de mi propia obra, ésta misma se lee desde Chihuahua - México- hasta la Patagonia Argentina.
Y es entonces, cuando pienso en la Libre del Barrio y en ésta otra madrastra pepinera que no compra ni deja comprar zapatos a sus hijos, porque jamás supo su talla ni le interesó saberla.
JOSMAN.
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