Acabo el segundo libro de Pío Baroja de La Lucha por la vida "La mala hierba" En el periódico Nuevo Crónica ya expresé que Galdós retrató Madrid en "Misericordia" Baroja lo diseccionó, se metió en la inmundicia del hoy desaparecido barrio de Las Injurias, situado donde hoy está Pirámides, a 4 Km. de donde yo nací, mi padre lo conoció, los estertores de su muerte, casi llegaron a mi infancia.
Pero Las Injurias en posguerra se trasladaron al Campo de la Mina, a Villaverde y Vallecas, - El Pozo del tío Raimundo- amanecíamos con docenas de las llamadas chabolas, de la gente que venía a Madrid huyendo de la hambruna, pero aquí también se mendrugueaba el pan atrasado.
Quienes no veían eso hablaban de una España "grande y libre" y allí se soñaba con ese Madrid de tener una habitación con derecho a cocina y luz eléctrica, aquello perduró hasta que mi madre me puso pantalón largo. y Franco hizo vivienda pública que no se vendía después a Fondos Buitres como hoy hace el PP, y el Agua no estaba privatizada el 49% y Telefónica era nuestra aunque no tuviéramos teléfono,y las eléctricas eran públicas.
El barrio de Las Injurias, Embajadores y Acacias era la antesala del Manzanares, donde Madrid casi acababa para acercarse a los carabancheles de mi nacencia.
Y hablan de España, desde "El Lazarillo" a la Justa, desde la huerta del arcipreste toledano hasta las niñas prostituidas pasando por El Buscón de Quevedo, todo es un retrato de injusticia social, y mirar la historia lo llaman involucionar, involucionar es seguir viendo como se sigue robando a los pobres, mientras el candil de la historia nos alumbra en la imprenta de Manuel, donde las rotativas impregnaban eso de que en España nunca habrá nada nuevo bajo el Sol, solamente se enmascaran sus rayos al antojo de la oligarquía de turno con gobiernos marionetas.
La segunda imagen perduró hasta mi infancia.
JOSMAN.
Fotos de ABC. Secretos de Madrid.
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