Entre los 208 artículos que escribiré en los cuatro años de legislatura local, de forma amateur, y que dedicaré en un libro a nuestro Alcalde Rafael Gómez Montoya, está este Cambalache Político, que escribí hace 2 años. Hoy se hace necesario recordarlo, leyendo y meditando sobre aquél tango, que hoy más que nunca se hace necesario cantar, oír y sentir, hace casi 80 años que se escribió el tango y pocas veces un autor del pasado siglo estuvo tan acertado.
Leganés como el resto de España, como Argentina, como en el pasado siglo XX, es un "cambalache problemático y febril", España a lo largo de su historia, desde que don Pelayo bajase hasta León tratando de encontrar a su hermana, raptadas por los árabes, ha sido, es y será el cambalache tanguero desde las mieles de los poderes civiles, eclesiásticos y militares, hasta los arrabales carabanchelero de mi barrio natal, un tratado de intereses que van desde la honorabilidad del ser hasta el averno anunciado por la Iglesia. (si es que existe el reino de Hades)
La vida de la ciudad en lo referente a la política, vive una crisis de valores tanto en la izquierda como en la derecha, y a uno le da por pensar en que, para valorar la situación lo mejor es pensar como un independiente y conservar la neutralidad política en este tiempo en que leemos a Antonio Gala en su Tronera (29-10-07) decir: “El hombre de verdad valioso y valeroso no pertenece a partido ninguno. Va por su camino sin que nadie le siga. No vuelve ni siquiera atrás la vista consciente de sus ideas y de las dificultades de ellas. No tiene necesidad de pedestales que le yergan”
Yo no soy ni valioso ni valeroso, pero me identifico con él, realmente los grandes hombre de España, los científicos y los insignes profesionales no están en política, eso se lo dejan para los mediocres que se esclavizan por un salario alto y por un trono de anea o de marfil. Es la nueva profesión, en la que el sueldo te lo marcas tú en tus presupuestos y, solo te exige ser esclavo de una idea marcada desde Ferraz o desde Génova. IU, vive del limosneo de un PSOE, que le necesita a cambio de pan y cebolla y algún cargo de confianza que deja de ser “mileurista” durante la legislatura para beber de la miel consistorial.
Estos meses atrás de peregrinaje por las salas Parlamentarias, observé y sentí en mi propia sangre como se elaboran las Leyes, es de pena, dos leyes vitales después de 163 años, como lo son el Régimen Disciplinario y Derechos y Deberes de los Guardias Civiles, tras más de siglo y medio.
Se acordaron entre cuatro amiguetes en el despacho de Diego López Garrido (Portavoz de PSOE en el Parlamento), acompañado de el Sr. Zambrana (Subsecretario de Interior) el diputado Antonio Hernándo y un Guardia Civil apellidado Perpinyá, de esa reunión salieron dos Leyes a Moncloa (Consejo de Ministros), de allí al Parlamento y Senado, mientras yo entre otros compañeros, exprimíamos nuestras mentes para escribir y convencer de nuestras sugerencias en las mociones de los grupos minoritarios: CUI, ERC, CC, BNG, estos Grupos lucharon por incluir nuestras propuestas de modificaciones al proyecto de los 4 citados y durantes meses los dos partidos mayoritarios jugaron conmigo al ratón y al gato. Hasta que un día en la Política Nacional entendí el gran Cambalache, y si aquello es un Cambalache ¿que no será nuestra ciudad de Leganés?
Aquí, en Leganés, no se hacen Leyes, pero se juega con los vecinos a quitar y poner la Tasa de Basura, según convenga. Ahora banderillas, ahora chicuelinas y manoletinas y al final el vecino, con recurso o sin él, se lleva la estocada moral y ética hasta la bola de estos mediocres.
En fin, Cambalache leganense, del que el próximo mes, estaremos alerta para ver como suena el próximo tango bicicletero de los 4 partidos políticos locales.
Cambalache: del poeta, compositor, actor y autor teatral (27 de marzo de 1901 – 23 de diciembre de 1951) Enrique Santos Discépolo, que decía en algunos de sus versos:
¡Qué falta de respeto, qué atropello
a la razón!
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y "La Mignón",
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia contra un calefón...
¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!...
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro
que un gran profesor!
No hay aplazaos
ni escalafón,
¡Que allá en el horno
nos vamo a encontrar!
¡No pienses más,
sentate a un lao,
que a nadie importa
si naciste honrao!
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley...
José Manuel García García (JOSMAN)
1 comentario:
Estimado amigo Josman: bien dices al decir, diciendo, lo que muchos piensan, escribiendo lo que los más débiles tenemos que soportar, la miseria y la incompetencia de personas que simpre han vivido de la polìtica, sin ser responsables de nada,este medio de vida lujoso es aborrecible, sólo aptos para golfos y sinverguenzas, recuerdo al recordar, la entrevista con el sumo sacerdote Don Antonio Hernando que no lo nombro por traidor de Nicolás Redondo, lo nombro por modelo de personaje, mal educado, el cual como todo político no sirve ni para representarse a sí mismo.
Así va la vida,ya decián los sofistas: Los poderosos hacen las leyes para dominar a los débiles, los políticos para vivir de las leyes -sean justas o injustas-- para vivir del cuento sin pegar golpe y engañando a todos, la política es el mayor desprestigio cultural que se nos presenta, en fin un engaño.
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