Siempre he dicho que existen dos Butarques, uno es un regalo de la ciudad al Club de Fútbol Leganés, que tantos éxitos cosecha, al igual que presuntas subvenciones millonarias, y el otro es el arroyo, minúsculo y abandonado, que forma un estanque que llamamos lago, entre no saber si su conservación pertenece a Hidrográficas del Tajo o al Excmo Ayuntamiento de Leganés le hace pervivir en el abandono más absoluto, porque no vota, y pasa lo que a ciertos colegios, ya escribí hace años que los niños no votan, y ni siquiera tienen "Juntas de Compensación" niños y arroyo, a corto plazo no tienen plusvalías, así como ladrillos y cemento, que vuelven a ponerse de moda, el Butarque no es ni Plaza Nueva, ni Puerta de Fuenlabrada, es un rincón de pesca y de enamorados clandestinos.
El Butarque en invierno.
Grisaceos días de invierno
sobre el plomizo Butarque,
Deshojadamente tristes
danzan las ramas bailantes,
la niebla lo invade todo
descendiente y suspirante.
Me cobijo bajo un pino
que mis secretos comparte,
aquel sabor a frambuesa
de las antiguas amantes..
Josman.
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